Después de un tiempo más largo del esperado, por fin he conseguido el momento para compartir con vosotros, antes de que acabe el año, otra de mis experiencias.
Esta vez quiero hablaros de SOY MAMUT, un nuevo espacio para mí, donde encontrarme con personas preocupadas por los valores, el medio ambiente y el emprendimiento social.
Los conocí hace un mes cuando participé en una de sus jornadas: "Futuro entre sonrisas" dentro de su proyecto de "huella positiva". El evento tuvo lugar en el Confital, lugar al que aún no había tenido ocasión de ir, donde realizamos acciones de carácter social, medio ambiental y cultural con las que actuamos frente a las problemáticas del entorno: Acumulación de residuos en un entorno protegido, poca sensibilización medioambiental y poco conocimiento del patrimonio natural del lugar.
Confital |
La playa del Confital es algo más que un lugar de recreo donde tomar el sol o mojarse los pies, el Confital es un lugar con historia y con un patrimonio medioambiental poco valorado.
¿Por qué se llama Confital? El nombre proviene del confite, algas de colores, calcáreas y redondas que cuando mueren salen a la superficie y con el sol van perdiendo el color hasta quedar totalmente blancas.
Confite |
Aunque parte de este paraje está protegido, pudimos observar durante la jornada que esto no se cumplía, muchos fósiles, como el de la imagen, son pisados por las personas que visitan el lugar, no existe ningún tipo de indicación, no hay sensibilización, comunicación, en definitiva la educación ambiental no está presente. Además, la zona está llena de residuos plásticos, cordeles, latas... ¿debería de haber más limpieza? ¿más control? ¿más actividades de concienciación? Es cierto que muchos de estos residuos vienen a través del oleaje y no se han depositado allí in situ, pero eso no quita que todas esas acciones sean necesarias para, reitero, sensibilizar.
Uno de los muchos fósiles encontrados en la costa |
En el año 100 a.C aparecieron los primeros asentamientos provenientes desde el continente africano. En la zona se pueden encontrar 20 oquedades que fueron utilizadas como lugar de vivienda, aquí se vivía del mar. Algunas de estas cuevas se utilizaron también para guardar el grano.
Desde el S.XX el Confital ha sido un lugar de esparcimiento donde se realizaban asaderos, barbacoas y reuniones. Así pues, empezaron a construirse pequeñas cabañas que poblaron el lugar y comenzaron a utilizarse como segunda vivienda, colocando fosas sépticas y en ocasiones las vendían como primera vivienda para trabajadores. Posteriormente acabó deteriorándose en un foco de chabolas hasta su erradicación en 2004. (Más información)
En la punta del Confital se puede observar uno de los búnkers de la segunda guerra mundial que se contruyeron debido a que se pensaba que los ingleses querían conquistar las islas porque creían que iban a perder el peñón de Gibraltar, al enterarse de esto los alemanes, Franco metió dinero para hacer estos búnkers, que pueden encontrarse en diversos puntos de la isla.
Búnker |
Como colofón una macedonia de frutas compartida. Una bonita experiencia para repetir.
@MariAmbient